Cada año, millones de pollitos recién nacidos son aventados en una trituradora. Otros son sofocados en bolsas de basura o con gas.
Todo esto para que la agroindustria pueda minimizar sus costos y maximizar sus ganancias. No podemos permitir que continúe esta crueldad.
En el 2019, Alemania y Francia se comprometieron a poner fin a esta práctica de crueldad para el 2021. Alemania ha cumplido pero Francia sigue sin tomar acción.
¡Dile al gobierno francés que cumpla con su compromiso de poner fin a la matanza de pollitos ahora!
Porque no producen huevos y su carne no es suficientemente lucrativa, pollitos machos son vistos como desperdicio en la industria alimenticia, llevando a una matanza sistemática.
El sexo de los pollitos generalmente se identifica después de 72 horas. Para entonces, sus habilidades cognitivas son similares a las de un bebé de 3 meses. Estudios muestran que estos pollitos sienten plenamente la pesadilla y tortura a las que los someten.
¡Exige al gobierno francés que ponga un fin a la matanza masiva de pollitos!
Más información
El País. 29 enero 2020.