La multinacional, desde su mediocridad, se está convirtiendo en la vergüenza de Suiza.

Nestlé ha anunciado que aspira a conseguir cero emisiones, incluidas las relacionadas con la producción de plásticos, para 2050. No es lo suficientemente ambicioso cuando el informe del IPCC (el Panel Interngubernamental contra el cambio climático) anuncia un caos climático sin precedentes en 2050 si no se hace nada rápidamente. Peor aún, un informe del Breakthrough-National Centre for Climate Restoration, basado en un modelo más pesimista, anuncia simplemente el fin de la civilización en 2050 si no se hace nada en los próximos años.

Si Nestlé quiere que le creamos, debe actuar ahora.

Dile a Nestlé que reduzca los envases de sus productos y sustituya todos los envases de plástico de un solo uso por envases reutilizables para 2025.

La alianza Break Free from Plastic identificó a Nestlé como uno de los mayores contaminadores de plástico del mundo. Durante meses, miles de voluntaries recogieron residuos de plástico en parques, playas, bosques, ciudades... Pudieron identificar las marcas que producen más residuos de plástico.

Nestlé contamina nuestro planeta con residuos de plástico que matan a los animales marinos y terrestres atrapándolos y enfermándolos.

Pero al producir estos envases de plástico, Nestlé también está contaminando directamente el medio ambiente. El plástico de Nestlé se produce a partir de resinas plásticas de empresas petroquímicas como Exxon, Total, Aramco o Shell. El proceso de fabricación del plástico, así como la extracción de sus materias primas, libera cantidades ingentes de CO2.

¡Esta carnicería climática debe terminar cuanto antes!

Dile a Nestlé que utilice envases reutilizables que le permitan alcanzar su objetivo de 0 emisiones en 2035.

Podemos obligar a Nestlé a comprometerse con objetivos más ambiciosos porque ya hemos empujado a otras empresas a hacerlo.

La primavera pasada, cientos de miles de miembres de SumOfUs como tú empujaron a BNP a publicar objetivos de deforestación más ambiciosos que nunca. El año pasado, impulsamos a Apple a adoptar una política de derechos humanos más ambiciosa que nunca.

¿Te movilizarás de nuevo para presionar a Nestlé para que haga lo correcto?